Esta es una buena oportunidad para volver al IPP, agradeciendo que me permitan escribir un poco sobre lo que es la pasión de mi vida: la publicidad. Pasión que estoy seguro comparto con muchos de los que me están leyendo y que quisiera tratar de transmitir a todos.
Si hacemos historia, empecé a fines del 69 en Mc Cann Erickson como redactor. Cuando el Instituto se formó, me animaron a crear el curso de creatividad y después a dictarlo. Mucha agua ha pasado bajo los puentes y ahora, tantos años después y luego de cerca de 16,000 ex alumnos del IPP, entre otros centros de estudios, creo que es hora de agradecer especialmente al IPP porque permitió que me iniciara en esta maravillosa aventura de enseñar, que siempre desarrollé desde 1985, paralelamente a mi actividad como publicitario, consultor político y responsable de las comunicaciones del gobierno de Alejandro Toledo.
Es el tiempo de decir gracias porque he podido mantenerme en un contacto que es vital para todo profesional y me ha permitido comprobar que la teoría y la práctica van permanentemente unidas, porque tan incompleto es el ratón de biblioteca como la hormiga afanosamente trabajadora.
En esta mi primera entrega para el blog del IPP quiero dejar constancia que gran parte de lo que soy, se lo debo a esas chicas y muchachos que con sus dudas, preguntas y escepticismo me aguijonearon para tratar de ser mejor y resolver, de la mejor manera, todas las cuestiones que se iban presentando.
Es lógico que quienes me lean piensen que esto que aquí digo es una especie de declaración lírica, escrita por alguien que ya está de salida. No es así: al IPP lo llevo profundamente en mi corazón no solo porque me permitió “ser” de un modo diferente, sino porque aprendí mucho más de lo que pude haber enseñado. Gracias a todos mis amigos y alumnos “ipepianos”. Van a tener que aguantarme un poco más, porque creo que a pesar de las dificultades, hay Manolo para rato y estaré por aquí con el cariño de siempre.
2 Comments
¡Gracias Ruthie por leer y por tus comentarios generosos. Lo mejor que he conseguido en mi vida es que mis ex alumnos, del IPP especialmente, sean mis amigos. Eso es impagable… Un beso, 🙂
¡¡Feliz de poder estar aquí!! No te imaginas lo contento que me siento de poder participar de alguna forma…
Un beso,
🙂