Hace tiempo que no viajo en avión, pero recuerdo que una aerolínea peruana llamada “Andrea Airlines” tenía publicidad en los asientos en una lengua extraña (que podría ser sueco, país de donde alquilaban los dos aviones que operaban). No recuerdo bien si estaba en la parte de abajo de las mesitas (que estaban cerradas durante decolaje y aterrizaje y dejaban a la vista el mensaje) o en el asiento mismo, detrás de las mesitas (y se veía cuando estas se bajaban).
Sobre esto, ya escribí antes, hace como tres años, pero no vi nunca nada así…
La memoria se vuelve esquiva, pero me pareció siempre –publicitario al fin- una brillante idea. Nunca más la vi. No sé si está prohibido el hacerlo por regulaciones de IATA, o cual es la causa que lo que podría ser un medio no se use, aunque es verdad que podría convertir al avión en una feria visual desesperante si o se utilizara con mesura y sapiencia. Técnicamente, vamos.
Me parece haber sido la única vez que vi un medio prometedor sin uso alguno, porque no creo que muchos de los pasajeros a Arequipa o Cuzco entendieran lo que allí se decía junto con la imagen. Eran sencillos stickers grandes a color, que daban un mensaje. Y pensé que claro, el pasajero a bordo formaba un auditorio cautivo y que si hubiera variedad en los mensajes… Pero no, era solo uno, que se repetía en todos los asientos… ¡en sueco!
“Andrea Airlines” ya no existe y con ella voló algo que, insisto, nunca vi en publicidad y llamó mi atención por inusual. Ahora bien, yo no soy muy cosmopolita que digamos y repito, ya no viajo en avión, ni en otra cosa, salvo en un taxi cuando voy al Seguro.
Manolo Echegaray.
Dejar un comentario