Todo el mundo en la profesión habla de “nuevos medios”, que lo son en relación a los diarios, la radio y la televisión, en ese orden. En realidad la partida de nacimiento no es tan nueva y ya tiene su tiempo, pero la comparación con los otros los hace ver como recién nacidos. Me refiero por supuesto a Internet y su diversos, innumerables contenidos, que van desde una página web con avisos hasta los blogs con auspiciadores, Facebook, Twitter y una legión que crece cada día y atomiza o segmenta (depende de cómo se lo vea) el universo de la Web.
A diferencia de los otros que tienen pequeños avances, la mayoría técnicos (como la HD TV), este es un medio en progresión. Surgen novedades constantemente y alrededor de unos gigantes aparecen emprendimientos que ofrecen mil posibilidades, no solo de negocio propio, sino de aquellos en los que la publicidad puede entrar a tallar.
Los “nuevos medios”, por su constante movimiento son muy visibles y además porque están en esa carretera o galaxia que se llama Internet que es una revolución.
Una revolución mundial que sin embargo requiere de un aparato llamado computadora, que a pesar de la existencia de millones de ellas (mil millones de PC´s, según una investigación de la empresa Gartner) en el mundo, el número que toca a nuestro país, aunque no sé de cifras, debe ser ínfima y estoy seguro que se concentra en áreas pobladas bastante grandes, porque el Perú es un país vasto, de geografía disímil y agreste, con niveles económicos y sociales diferentes y con una tecnología que comparada, aún está en pañales (leía el otro día que aquí se da un 10% de la velocidad que se ofrece en Internet, contra un 70 u 80% de otros lugares en el mundo). Esto hace, me parece, que estos “nuevos medios” no tengan difusión masiva, esa que la publicidad en general necesita. Lo que pasa es que a veces observamos el asunto desde una óptica propia y que puede estar equivocada. Solemos decir que “todos ven” o “todo el mundo quiere” y ese “todos” se reduce a un grupo pequeño de conocidos nuestros.
Apostar por los productos que ofrece la Web es necesario, pero estos van a servir para segmentar. Hay que tomar el ramillete de ofertas con mesura, con el cuidado necesario y en base a un análisis cierto. No porque “todos lo hacen” es que hay que hacerlo. Recordemos siempre que la publicidad es un negocio y como todo negocio, requiere una inversión y nadie invierte para perder.
No soy especialista y estoy seguro que ellos (los especialistas) tienen la última palabra, pero pienso a veces que como pasó con la televisión que vaticinaron mataría a la radio, no es que Internet va a “desaparecer” a medios como la radio, los diarios o la televisión, sino que es un medio distinto, con características diferentes y que, como vemos a cada rato, los utiliza y potencia. Un medio que tiene muchísimo camino por recorrer, porque la tecnología nos asombra siempre más.
Dejar un comentario