La creación audiovisual es, antes que nada, un proceso comunicativo. Todo producto o servicio es un mensaje que se desea hacer llegar a alguien y para que este proceso sea culminado conexito, se deberá realizar mediante el empleo de un código común entre el emicor y el receptor. Por esto, el cine tiene su propio lenguaje.
La narración es un aspecto fundamental dentro de la condición humana. La narrativa se encuentra presente desde toda época, todo lugar y toda sociedad. La narrativa va mucho más allá que sólo un conjunto de textos que comparten elementos, es una capacidad innata, una habilidad, la gente utiliza la narrativa para así poder organizar sus experiencias coherentemente.
En el cine, la narrativa tiene dos dimensiones: el argumento que se compone de persojanes, los escenarios acontecimientos y acciones. Y, el argumento se hace realidad a través de un discurso, la expresión de la historia a través de un medio de comunicación. Entonces, el argumento es una serie de acontecimientos narrados, el cual se puede contar de distintas formas.
Los personajes dentro del film son elementos básicos para lograr llamar la atención. Los personajes son construcciones en relación a una serie de signos, como diálogos, comportamientos y apariencias, con esto, el espectador realiza inferencias sobre ellos.
Por otro lado, el discurso se compone de un narrador, una narración del discurso, un sujeto al que va dirigida la historia y una situación que vincula al espectador con el texto. La narración logra convertir un flujo de imágenes en una historia con significado. El cine en particular tiene la habilidad de ocultar al narrador, a diferencia de la escrita. El narrador de un relato visual es una construcción netamente textual, la posición de la cámara (punto de vista) y el tipo de montaje determinarán la sensación de estar dentro o fuera de la historia.
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